Experimento 1: Flecha que cambia de sentido
El fenómeno óptico que explica el giro de la flecha en función de si el vaso tiene aire o agua se denomina refracción.
Cuando la luz pasa de un medio a otro, refracta, y todos los rayos se concentran en el conocido punto focal, aquel lugar donde se concentran todos los haces de luz al cambiar de dirección. Antes del punto focal, la imagen se ve de manera normal, pero al superarlo cuando echamos agua, se observa invertida.
Materiales:
Tarro transparente
Papel
Boli
Agua
¿Cómo se hace?
Llenamos un tarro transparente con agua y detrás ponemos un papel con dos flechas dibujadas en la misma dirección. Así podremos ver el cambio de sentido de una flecha con respecto a la otra cuando echamos el agua dentro del recipiente.
Experimento 2: Globo que se infla solo
Cuando metemos el trozo de botella en el interior del recipiente con agua, vemos que el guante se infla solo. Esto se debe a que el trozo de la botella tiene aire y ese aire está ocupando un espacio. Cuando se introduce en el agua, esta empuja el aire hacía arriba e infla el globo. Cuando lo sacamos, ese aire vuelve a ocupar el espacio del agua con lo que el guante se vuelve a desinflar.
Materiales:
Guante de látex
Recipiente con agua
Botella grande
¿Cómo se hace?
Cortamos una botella por ambas partes hasta tener un cilindro abierto por las dos caras. Una de las caras la cubrimos con un guante de látex y la otra queda al descubierto. Esta última cara es la que vamos a meter y a sacar del recipiente con agua y gracias a la cual, se inflará el guante.
Experimento 3: Fantasma atrapado en una botella
Al apretar la botella se comprime el aire atrapado en la parte superior de la botella y en el interior del fantasma. Entra agua en el interior del fantasma, por lo que se produce un aumento del peso y este se hunde. Al dejar de apretar la botella, el agua sale del fantasma, pierde peso y asciende a la superficie.
Materiales:
Botella con agua
Guante de látex
Una anilla
Un rotulador permanente
¿Cómo se hace?
Cortamos un dedo de un guante de látex y le dibujamos la cara de un fantasma. Introducimos una anilla en su interior dejando un poco de aire en la parte superior del interior del guante. Por último, metemos el fantasma en una botella pequeña llena de agua hasta arriba, dejando un poco de aire en la parte superior.
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