Lo prometido es deuda. Aquí os traigo 3 nuevas actividades para hacer con el libro "Emocionario". Tenéis un post anterior con 2 actividades anteriores, ¡acordaros de pasar por allí!
Miércoles: Serenidad
A partir de la ilustración del libro original, introduciremos el concepto de “serenidad”. ¿Por qué esta emoción en particular? Por lo sumamente útil que puede ser, para mantener la calma en clase, a la hora de irse a dormir, cuando tengan alguna rabieta...
Primero mostraremos la imagen asignada a la emoción según el libro “Emocionario”. Dejaremos que el niño (o el alumnado) defina con sus propias palabras o a través de ejemplos el significado de “serenidad”. Al final de la puesta en común de las distintas ideas, se hará un resumen del significado del concepto y se leerá el extracto del libro original. Tras esto, pondremos música relajante y realizaremos una técnica de relajación:
Tumbados o en la posición más cómoda, cerraremos los ojos y le contaremos al niño (o a los niños) que una persona es como un globo; puede inflarse y contener muucho aire dentro, pero si tiene demasiado, puede explotar. A continuación, imaginaremos ser un globo, y mientras inhalamos aire, nos hinchamos como un globo. Después, poco a poco, nos desinflaremos exhalando aire. Tras hacer esto 2 o 3 veces, tenemos que sentir cómo flotamos, poco a poco, nuestro cuerpo parece no pesar y nos elevamos al cielo. Relajamos el cuerpo progresivamente; primero los pies, después las piernas, el tronco, las manos, los brazos y la cabeza. Para terminar, abriremos los ojos poco a poco y nos levantaremos despacio. Después podemos comentar cómo nos hemos sentido.
Si sois profes podéis hacerlo recostados en la misma mesa, después del recreo o en momentos de mayor excitación. Lo ideal es relacionarlo con la emoción de la serenidad, de forma que los alumnos sepan dar nombre a lo que están sintiendo.
Jueves: ¿Quién es quién?
A partir de la lectura de las emociones del libro, con esta actividad os propongo hacer una búsqueda en revistas, periódicos o publicidad en papel, imágenes que correspondan con las emociones que escogáis.
Viernes: Escucho lo que siento
Para terminar, haciendo uso de la música, un gran recurso para favorecer la expresión emocional, podemos escuchar diferentes obras musicales que inspiren emociones dispares. Mientras, podemos dejar que el niño se mueva libremente por el espacio, o proponerle que la escuche tranquilamente sentado. Os dejo algunas ideas de obras musicales, pero pensad en el gusto de vuestros peques:
Alegría: Scott Joplin – The entertainer
Tristeza: Yiruma – River flows in you
Placer: Vivaldi – Invierno
Irritación : Vivaldi - Verano
Y se acabó la semana de emociones. Espero que os hayan gustado las ideas y las pongáis en práctica. Añadid vuestras modificaciones y adaptarlas a vuestros peques, así os aseguráis que funcionen :)
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